La clandestinidad es algo que está muy vivo, pero enterrado
Hay que sacarse la careta, salir del encierro de lo clandestino, como si eso fuera lo prohibido…
Te toma, te aborda y te arrebata….Pero aquello que mantenemos clandestino, en algún momento toma su lugar…
La leña que no se consume, sigue chispeando: eso es la clandestinidad
Porque la clandestinidad, tarde o temprano, prende, renace de la ceniza, te quema….
Finalmente lo clandestino sale a la luz, abandona la oscuridad para luchar por lo que quiere, desafía al deber ser, a lo prohibido y ya sin esconderse, lucha a cielo abierto….
La clandestinidad es lava fundida, enterrada bajo miles de metros de hielo. Es algo que esta muy vivo, pero enterrado. Hay que abrir una grieta en el hielo, y dejar salir ese fuego.
Hay que sacarse la careta, salir del encierro, de lo clandestino, como si eso fuera lo prohibido. Lo prohibido, lo clandestino, es una olla a presión... cuando llega a su punto te explota en la cara, te salpica, te moja, te sorprende. Te toma, te aborda, te arrebata… así lo niegues, eso que mantenemos en la sombras, clandestino, tarde o temprano reclama su lugar.
La leña que se moja, pero que no se consume, sigue chispeando, eso es la clandestinidad. Porque la clandestinidad tarde o temprano prende, renace de las cenizas, te quema.
Finalmente lo clandestino sale a la luz. Abandona las sombras, la oscuridad, para luchar por lo que quiere. Desafía al deber ser, a lo prohibido, y ya sin esconderse, sin ocultarse, lucha a cielo abierto.